Hijo de Dios. Miércoles XIII

Hijo de Dios. Miércoles XIII

1 de julio de 2025 0 Por Gospa Chile

«Ustedes sólo pueden descubrirlo y reconocerlo a El en la oración: por eso, decídanse por la oración! Gracias por haber respondido a mi llamado! ” (Mensaje, 25 de enero de 1990)


Oración al Espíritu Santo

Recibid ¡oh Espíritu Santo!, la consagración perfecta y absoluta de todo mi ser, que os hago en este día para que os dignéis ser en adelante, en cada uno de los instantes de mi vida, en cada una de mis acciones, mi director, mi luz, mi guía, mi fuerza, y todo el amor de mi corazón.
Yo me abandono sin reservas a vuestras divinas operaciones, y quiero ser siempre dócil a vuestras santas inspiraciones.
¡Oh Santo Espíritu! Dignaos formarme con María y en María, según el modelo de vuestro amado Jesús. Gloria al Padre Creador. Gloria al Hijo Redentor. Gloria al Espíritu Santo Santificador. Amén


Santo Evangelio

Evangelio según san Mateo 8, 28-34

En aquel tiempo, llegó Jesús a la otra orilla, a la región de los gerasenos. Desde el cementerio, dos endemoniados salieron a su encuentro; eran tan furiosos que nadie se atrevía a transitar por aquel camino.
Y le dijeron a gritos: «¿Qué quieres de nosotros, Hijo de Dios? ¿Has venido a atormentarnos antes de tiempo?»
Una gran piara de cerdos a distancia estaba hozando. Los demonios le rogaron: «Si nos echas, mándanos a la piara.»
Jesús les dijo: «Id.»
Salieron y se metieron en los cerdos. Y la piara entera se abalanzó acantilado abajo y se ahogó en el agua. Los porquerizos huyeron al pueblo y lo contaron todo, incluyendo lo de los endemoniados. Entonces el pueblo entero salió a donde estaba Jesús y, al verlo, le rogaron que se marchara de su país.


Meditación Patrística:

Primer Punto: Los hombres decían que Cristo era hombre, pero vinieron los demonios publicando su divinidad, para que, los que no habían oído hablar del mar alborotado y encalmado después, oyesen a los demonios clamando. Por ello prosigue el evangelista: «Y cuando hubo venido Jesús de la otra parte del lago a la región», etc.
No es ésta la confesión voluntaria, a la que sigue el premio de los que confiesan, sino la extorsión de la necesidad que obliga a los forzados. Así como los esclavos fugitivos si ven a su señor después de mucho tiempo no suplican otra cosa sino acerca de los azotes, así los demonios, viendo que el Señor se hallaba de repente en la tierra creyeron que había venido a juzgarlos. (San Jerónimo)

Segundo Punto: No pidieron que se les entrase en los hombres, porque veían que Aquel que los atormentaba tenía figura humana. Tampoco pidieron se les entrase en un rebaño de bueyes o corderos, porque eran animales limpios por precepto de Dios, y entonces se ofrecían en el templo del Señor. Con preferencia a otros inmundos, pidieron se les entrase en los puercos, porque ningún animal hay más inmundo que el puerco. Es sinónimo de inmundo, porque se deleita con las inmundicias, así como los demonios se deleitan con las inmundicias de los pecados. No pidieron que se los lanzase al aire, a causa de su excesiva codicia de hacer daño a los hombres. (Remigio, autor eclesiástico Iglesia primitiva)

Tercer Punto: En cuanto a que los puercos se precipitasen en el lago, significa que, aun después de libertado el pueblo de los gentiles de la dominación de los demonios, ejercen sus ceremonias sacrílegas en sitios ocultos los que no quisieron creer en Jesucristo, cegados y en profunda curiosidad sumergidos. En cuanto a que anuncian esto los pastores de los puercos cuando huyen, significan a ciertos jefes de los impíos, que, aunque huyen del cumplimiento de la ley de Cristo, no cesan de predicar, asombrando el gran poder de Jesucristo. En cuanto a que aterrados le ruegan que se separe de ellos, significa la multitud, deleitada con la antigua desidia, no queriendo honrar la fe cristiana, alegando que no pueden cumplirla. (San Beda)


Mensaje, 25 de enero de 1990

“¡Queridos hijos!» Los invito a la entrega a Dios. En este tiempo, Yo deseo especialmente que ustedes renuncien a aquellas cosas a las que se han apegado y que perjudican su vida espiritual. Por eso, mis queridos hijos, decídanse enteramente por Dios y no permitan que Satanás entre en sus vidas a través de esas cosas que los dañan en su vida espiritual. Mis queridos hijos, Dios Se ofrece a ustedes en plenitud. Ustedes sólo pueden descubrirlo y reconocerlo a El en la oración: por eso, decídanse por la oración! Gracias por haber respondido a mi llamado! ”


Coloquio:

Padre, líbranos de todo lo que ha tomado el primer lugar en nuestra vida y que impide que Tú ocupes ese lugar. Padre, sana nuestras relaciones a fin de que seamos curados y lleguemos a ser santos. Danos amor unos por otros, Te lo suplicamos y sana las relaciones que están lastimadas en las familias, a fin de que cada esposo pueda decirle a su esposa: «Te deseo el bien», que cada esposa pueda decirle a su esposo: «También yo te deseo el bien,» que los padres unidos puedan decir a sus hijos eso mismo y también éstos puedan responderles igual. Que el bien encuentre espacio en las familias, de tal modo que en todas las familias, por Jesucristo, Tu Hijo, puedan vivir en paz y en el bien. (Fray Slavko Barbaric, 27 de Enero 1998)


Comunión Espiritual:

“Padre eterno, permitid que os ofrezca el Corazón de Jesucristo, vuestro Hijo muy amado, como se ofrece Él mismo, a Vos en sacrificio. Recibid esta ofrenda por mí, así como por todos los deseos, sentimientos, afectos y actos de este Sagrado Corazón. Todos son míos, pues Él se inmola por mí, y yo no quiero tener en adelante otros deseos que los suyos. Recibidlos para concederme por sus méritos todas las gracias que me son necesarias, sobre todo la gracia de la perseverancia final. Recibidlos como otros tantos actos de amor, de adoración y alabanza que ofrezco a vuestra Divina Majestad, pues por el Corazón de Jesús sois dignamente honrado y glorificado. Amén.” (De Santa Margarita María Alacoque)