Tendrás tu recompensa… Lunes XXXI

Tendrás tu recompensa… Lunes XXXI

3 de noviembre de 2025 0 Por Gospa Chile

«Ayuden a todos a vivir la santidad, especialmente en sus familias. Gracias por haber respondido a mi llamado!”  (Mensaje, 24 de julio de 1986)


Tendrás tu recompensa en la resurrección Lunes XXXI

Evangelio Diario y Meditación


Oración al Espíritu Santo

Recibid ¡oh Espíritu Santo!, la consagración perfecta y absoluta de todo mi ser, que os hago en este día para que os dignéis ser en adelante, en cada uno de los instantes de mi vida, en cada una de mis acciones, mi director, mi luz, mi guía, mi fuerza, y todo el amor de mi corazón.Yo me abandono sin reservas a vuestras divinas operaciones, y quiero ser siempre dócil a vuestras santas inspiraciones. ¡Oh Santo Espíritu! Dignaos formarme con María y en María, según el modelo de vuestro amado Jesús. Gloria al Padre Creador. Gloria al Hijo Redentor. Gloria al Espíritu Santo Santificador. Amén


Santo EvangelioEvangelio según san Lucas 14, 1. 12-14

Un sábado, Jesús entró a comer en casa de uno de los principales fariseos. Ellos lo observaban atentamente.Jesús dijo al que lo había invitado: “Cuando des un almuerzo o una cena, no invites a tus amigos, ni a tus hermanos, ni a tus parientes, ni a los vecinos ricos, no sea que ellos te inviten a su vez, y así tengas tu recompensa.Al contrario, cuando des un banquete, invita a los pobres, a los lisiados, a los paralíticos, a los ciegos.¡Feliz de ti, porque ellos no tienen cómo retribuirte, y así tendrás tu recompensa en la resurrección de los justos!”


Meditación Patrística:

Primer Punto: Aunque el Señor conocía la malicia de los fariseos, aceptaba sus convites para ser útil a los que asistían a ellos con sus palabras y milagros. Por esto sigue: «Y aconteció que entrando Jesús un sábado en casa de uno de los principales fariseos a comer pan, ellos le estaban acechando». Esto es, si faltaba a la reverencia debida a la ley o si hacía algo de lo que estaba prohibido en día de sábado. En efecto, habiendo llegado un hidrópico a presencia suya, por medio de una pregunta reprimió la insolencia de los fariseos que se proponían argüirle. Por esto dice: «Y he aquí que un hombre hidrópico estaba delante de El. Y Jesús dirigiendo su palabra», etc. (San Cirilo)

Segundo Punto: no hagamos beneficios a otros en la confianza de que nos lo paguen, porque esta intención es fría y de aquí viene que tal amistad se desvanezca pronto. Pero si convidas al pobre, tendrás por deudor a Dios, que nunca olvida. Por esto sigue: «Mas cuando haces convite, llama a los pobres, lisiados, cojos y ciegos». Cuanto más pequeño es tu hermano, tanto más se aproxima Cristo y visita por él. Porque quien recibe a un grande lo hace muchas veces por vanagloria y por otros fines y se busca en muchas ocasiones la ventaja de ser promovido por él. Yo podría hacer mención de muchos que tratan a muy ilustres senadores para obtener por medio de ellos gracias extraordinarias y elevados puestos. No busquemos, pues, a los que pueden pagarnos los convites. Por esto sigue: «Y serás bienaventurado, porque no tienen con qué corresponderte». No nos turbemos, por tanto, cuando no recibamos el pago de nuestros beneficios, sino cuando lo recibamos; porque si lo recibimos aquí, nada recibiremos allí; pero si los hombres no nos pagan, Dios nos lo pagará. (San Juan Crisóstomo) 

Tercer Punto:  En sentido espiritual, el que evita la vanagloria llama a los pobres a un convite espiritual (esto es, a los ignorantes) para enriquecerlos. A los débiles (o a los que tengan la conciencia dañada) para curarlos. A los cojos (o a los que se apartan de la recta razón) para que enderecen sus caminos. A los ciegos (esto es, a los que carecen de la contemplación de la verdad) para que vean la verdadera luz. Y respecto a lo que dice: «Porque no tienen con qué corresponderte», se entiende que no supieron qué responder. (Orígenes)


Mensaje

“¡Queridos hijos! Estoy contenta por todos los que se hallan en el camino de la santidad. Les pido que ayuden con su testimonio a todos aquellos que no saben vivir el camino de la santidad. Por lo tanto, queridos hijos, que su familia sea el lugar en donde nazca la santidad. Ayuden a todos a vivir la santidad, especialmente en sus familias. Gracias por haber respondido a mi llamado!”  (Mensaje, 24 de julio de 1986)


Coloquio:  

Espíritu de verdad, que conoces las profundidades de Dios, memoria y profecía de la Iglesia, dirige la humanidad para que reconozca en Jesús de Nazaret el Señor de la gloria, el Salvador del mundo, la culminación de la historia.
¡Ven, Espíritu de amor y de paz!
Espíritu creador, misterioso artífice del Reino, guía la Iglesia con la fuerza de tus santos dones para cruzar con valentía el umbral del nuevo milenio y llevar a las generaciones venideras la luz de la Palabra que salva.  (San Juan Pablo II)


Comunión Espiritual:

 “Padre eterno, permitid  que os ofrezca el Corazón de Jesucristo,  vuestro  Hijo muy  amado, como se ofrece Él mismo, a Vos  en sacrificio. Recibid  esta ofrenda por mí, así como por todos los deseos, sentimientos, afectos  y actos de este Sagrado Corazón. Todos son  míos, pues Él se inmola por mí,  y yo no quiero tener en adelante otros deseos que los suyos. Recibidlos para concederme por  sus méritos todas las gracias que me son necesarias, sobre todo la gracia de la perseverancia  final. Recibidlos como otros tantos actos de amor, de adoración y alabanza que ofrezco a vuestra  Divina Majestad, pues por el Corazón de Jesús sois dignamente honrado y glorificado. Amén.” (De Santa Margarita María Alacoque)