«A TODOS LOS QUE SE HAN CONSAGRADO A MI CORAZON INMACULADO…»

«A TODOS LOS QUE SE HAN CONSAGRADO A MI CORAZON INMACULADO…»

3 de junio de 2024 0 Por Gospa Chile

«A través de su consagración se han convertido en una comunidad con María…»

Comentario Fray Slavko


Mensaje, 25 de agosto de 1997

“¡Queridos hijos! Dios me da este tiempo como un don para ustedes, para poder enseñarles y guiarlos por el camino de la salvación. Ahora, hijitos, no comprenden esta gracia, pero llegará pronto el tiempo cuando añorarán estos mensajes. Por tanto, hijitos, vivan todas las palabras que les he estado dando durante este tiempo de gracia y renueven la oración, hasta que la oración se convierta en gozo. Invito especialmente a aquellos que se han consagrado a mi Corazón Inmaculado para que lleguen a ser ejemplo para los demás. Invito a todos los sacerdotes, religiosos y religiosas a rezar el rosario y a enseñar a rezarlo a los demás. El rosario es para mí, hijitos, algo especialmente querido. Mediante el rosario abran su corazón y así los puedo ayudar. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado! ”

«INVITO, ESPECIALMENTE, A TODOS LOS QUE SE HAN CONSAGRADO A MI CORAZON INMACULADO A SER UN EJEMPLO PARA LOS DEMAS»

Consagrarse uno mismo a María significa en realidad, tomar la firme decisión de estar con Ella, escucharla y dejarse guiar por Ella. La palabra en latín ‘consacratia’ viene de dos palabras: ‘con sacrare’ y significan, volverse santos con alguien que ya es santo. Y puesto que ‘con’ [en latín] significa también ‘con’ [en español], quiere decir al mismo tiempo una nueva comunidad. Los consagrados deben saber por tanto, que a través de su consagración se han convertido en una comunidad con María. Este es el camino a la santidad, porque María -que encontró y experimentó la santidad- conoce el camino a la santidad y es por eso que puede conducirnos a él. Al mismo tiempo, ‘con sacratia’ o consagración significa también que el hombre ya no está solo. El pecado había apartado al hombre de los demás y de Dios, la consagración crea una nueva comunidad y el hombre ya no está solo. Y en esta nueva comunidad, puede tener paz, gozo, seguridad, confianza y con todo ello, él puede asimismo crecer. Quienes se han consagrado son los que, a través de su ejemplo, deben auxiliar a los demás. Su ejemplo se hace posible, porque -a través de su consagración a María- deben convertirse en realidad en personas nuevas. Especialmente hoy, el mundo espera a personas que vivan en paz, que sean libres, que estén dispuestas a amar, que tengan tiempo para otros, que tengan el valor de servir, que permanezcan fieles al camino y que no se dejen extraviar por el pecado. Los consagrados son quienes siempre miran adelante–adelante hacia Dios. Los consagrados son también quienes dan testimonio a otros de su nueva realidad. Son personas [que han sido] sanadas y salvadas, y justamente son también personas santas. Son especialmente esta clase de personas las que el mundo necesita hoy. Después María dice…

«INVITO A TODOS LOS SACERDOTES, RELIGIOSOS Y RELIGIOSAS A REZAR EL ROSARIO Y ENSEÑAR A REZAR A LOS DEMAS»

Ciertamente, cuando los consagrados, cuando los sacerdotes al igual que los religiosos y religiosas se decidan todos a rezar, el pueblo entero llegará también más fácilmente a esta decisión.

«EL ROSARIO, HIJITOS, ME ES ESPECIALMENTE QUERIDO»

Todos sabemos esto a través de la historia de la Iglesia. Fue María quien nos lo dio. El Rosario es una oración muy simple que está profundamente arraigada en la Biblia. En los 15 Misterios, con toda sencillez tenemos la posibilidad de estar con Jesús y María en el gozo, en el dolor y en la gloria. Y esto es lo que hay que enseñar a la gente cuando se reza el Rosario. Tristemente, para muchas personas el Rosario es sólo una repetición que puede hacerse tediosa. Con todo, el Rosario es de hecho un encuentro profundo con Jesús y María. Quien reza el Rosario, contempla a Jesús y María, cómo se comportaron en el gozo y en el dolor y luego, cómo entraron en la gloria. Esto es exactamente lo que cada uno de nosotros, la gente de hoy, en efecto necesitamos. Necesitamos mirarlos y luego cambiar nuestra comportamiento de acuerdo al Suyo y así, con este cambio de comportamiento, ser un ejemplo para todos los demás. Con todo, el verdadero secreto del Rosario es el amor por Jesús y María. Si uno no tiene ese amor, el Rosario simplemente se queda en una tediosa repetición. A menudo, en los mensajes María nos ha invitado a abrir nuestro corazón, pero aquí nos dice cómo.

«A TRAVES DEL ROSARIO ABRANME SU CORAZON»
… y esto es una condición, para que

«ENTONCES YO PODRE AYUDARLOS»

Quienes rezan los tres Misterios enteros cada día, ciertamente se abrirán cada vez más y experimentarán siempre más y más ayuda. El corazón se abre a Dios, porque quienes rezan el Rosario están contemplando a Jesús y María. Ambos saben que cuando a la gente le va bien, eso puede cerrar sus corazones. Saben también que cuando a la gente no le va bien, eso mismo puede ocurrir y las personas se hunden en la desconfianza y el enojo hacia Dios a causa de su sufrimiento. Pero a fin de que esto no suceda, que ni el bien ni el mal pueda cerrar nuestro corazón, debemos permanecer con María y con Jesús. Así, en cada situación, nuestro corazón permanecerá abierto tal como el de Jesús y el de María. Todavía depende de nosotros, si nuestro corazón está abierto para que podamos experimentar la ayuda. Quizá sería bueno recordar que el 14 de Agosto de 1984, María nos invitó -a través del vidente Ivan- a rezar el Rosario completo. Fue durante la vigilia de la Asunción de María cuando Ivan, mientras se preparaba para venir a la Misa, fue visitado inesperadamente por Nuestra Señora y Ella le dijo que todos debíamos rezar el Rosario completo. Fue en esa misma ocasión, cuando María nos dijo que ayunáramos dos días, miércoles y viernes, en vez de sólo uno. Así pues, ¿qué se supone que debemos decir a los sacerdotes y religiosos? Rezar el Rosario y enseñar a otros a rezar, la gente necesita algo firme. Si uno les repite una y otra vez que necesitan orar, muchos no sabrán cómo comenzar. Pero si uno les dice como María lo hizo aquí y si a través del propio ejemplo se da a la gente el impulso, entonces sucederá. Si el sacerdote dice que él guiará el Rosario antes de la Misa, la gente comenzará a venir. No es nada nuevo cuando digo que muchos sacerdotes han confirmado, que fue sólo aquí en Medjugorje que comenzaron de nuevo a rezar el Rosario, tanto personal como públicamente y que encontraron eco en todas partes. Por eso, este mensaje debe realmente ser una vez más un nuevo impulso para que, en este tiempo, nos decidamos a acoger a María como nuestra Madre y Maestra, para permanecer con Ella en el camino de la santidad y que tomemos el Rosario en nuestras manos y lo recemos. Aún cuando no sepamos lo que todo esto significa, debemos ser simplemente como los niños que se dejan conducir por su madre. Que así sea.

Oremos…

Dios, Padrenuestro, Te damos gracias por haber concedido este tiempo a María y que Ella, con Tu permiso, oh Padre, nos conduzca y nos instruya. Te damos gracias por todas esas personas que, a través de estos mensajes, Te han abierto su corazón. Te damos gracias y Te alabamos por todas las personas que durante este tiempo recorren el camino de la santidad Contigo. Por favor bendice a todos los que han encontrado la paz interior a través de los mensajes de Medjugorje. Envía Tu Espíritu Santo a nuestros corazones, para que podamos llegar a comprender esta gracia y podamos vivir cada palabra que Tú nos has dicho a través de María. Danos la gracia de poder renovar la oración y que sea un gozo para nosotros. Por favor, perdónanos también por cada vez que hemos orado sólo por motivos egoístas. Danos la gracia de primeramente buscarte a Ti en la oración, porque Tú nos amas. Da a todos los padres de familia la gracia de orar con sus hijos, a fin de que también sus hijos se abran a la oración y experimenten gozo en la oración. Bendice a todos los jóvenes que Te buscan como su buen Señor y Maestro. Bendice a todos los consagrados para que puedan ser un ejemplo para los demás. Bendice a los sacerdotes, a todos los religiosos y religiosas, a todos los catequistas. Que todos ellos se decidan verdaderamente por la oración y de ese modo, que Tu Iglesia entera se convierta en Iglesia orante. A través del Espíritu Santo, abre nuestros corazones para que estemos dispuestos a aceptar Tu ayuda. Padre, bendice a todas las familias y a todos los grupos de oración y bendice a Tu Iglesia entera, a fin de que durante este tiempo seamos capaces de emprender el camino a la santidad junto con María. Te damos gracias, oh Padre, por el amor que muestras hacia nosotros. Seas alabado, oh Padre, con Tu Hijo Jesucristo y por el Espíritu Santo. Amén.


Fray Slavko , Medjugorje, Agosto 29 de 1997

Fuente: Medjugorje.ws


SI QUIERE RENOVAR SU CONSAGRACIÓN O CONSAGRARSE POR PRIMERA VEZ, COMUNICARSE UNIRSE AL CHAT CONSAGRACIÓN