Padre Livio y Vicka, entrevista

ENTREVISTAS DE VICKA DE MEDJUGORJE 

EN RADIO MARIA ITALIA

Vicka de Medjugorje realizó cinco entrevistas en vivo por Radio María que son un importante documento histórico sobre las apariciones de Medjugorje y un testimonio de profunda espiritualidad mariana. Los publicamos dividiéndolos en episodios.

Los miedos de los jovenes

Padre Livio: Pero en los jóvenes hay otro miedo. Cuéntamelo y ten por seguro que tú también lo has notado, que conoces a mucha gente joven y has ganado mucha experiencia. Muchos de ellos tienen muy en cuenta que seguir a Dios se está exigiendo con dificultad, como si Dios estuviera siendo exigido por su fuerza.

Vicka: Realmente no son solo los jóvenes los que dicen esto. Me gustaría dar un pequeño ejemplo de este sentimiento. Una vez reuní un gran grupo de italianos y, como siempre, comencé a orar y luego comencé a informar los mensajes de Nuestra Señora. Cuando llega al momento de las oraciones, un sacerdote bastante joven levanta la mano y me habla diciendo: «Vicka, creo que Nuestra Señora nos está pidiendo demasiado». Le respondí: “Padre, todas las cosas que pide Nuestra Señora son las sencillas que prescribe la Iglesia. Ella misma decía que no venía a decirnos cosas nuevas, fino a despertar nuestra fe. Todo lo que la Virgen nos recomienda existe en la Iglesia, solo que poco a poco debemos tratar de vivirlo.

Sin embargo, este sacerdote no estaba convencido porque en una parroquia grande con tantas cosas que hacía, según él, no era posible rezar tres rosarios todos los días como Nuestra Señora pide. Él respondió que esa era la recomendación de Nuestra Señora y que si podía aceptarla, si no, podía dejarla. Y así se fue. Sin embargo, un mes después volvió y me dijo: “Vicka, comencé a orar un pos más cada día y entendí que todo es posible. Cuando llegué no estaba lista y fue demasiado para mí. Ahora, sin embargo, soy capaz de poner en práctica poco a poco todo lo que Nuestra Señora quiere”.

Volviendo a los jóvenes, tendrían que decidir que hoy muchos jóvenes tienen otras cosas en la cabeza y por eso piden que sigan a Dios, pero si un joven organiza mejor su vida y dedica más tiempo a Dios, la cosa cambia. . Así es como el mundo entero puede cambiar.

Padre Livio: ¿Entonces no es difícil seguir a Jesús?

Vicka: Para alguien que no lo ha intentado y nunca ha hecho nada, es difícil y es esta persona quien dice que es difícil. Pero si uno lo ha intentado y este es un compromiso a seguir de cerca, entonces es fácil. No hay problema.

Nuestra Señora ha elegido a seis jóvenes

Padre Livio: Ya que estamos hablando de la preocupación de Nuestra Señora por los jóvenes, permítanme hacer una breve observación. Generalmente en sus apariciones Nuestra Señora elige niños, como sucedió en Lourdes, La Salette, Fátima, Banneux, Beaurin y otros lugares. Aquí en Medjugorje, sin embargo, ha elegido muchachos de unos quince o tres años, cuando comienza la fase más delicada y difícil de la vida. Quizá con esta elección la Virgen quería expresar su solicitud por los jóvenes de nuestro tiempo que, como Ella dice, se encuentran en una situación llena de dificultades.

Vicka: Nuestra Señora sabe lo que se propone con esta elección. Jakov estaba en realidad todavía un niño de diez años. Cuando Nuestra Señora hace sus elecciones, la obliga a cuidar de sus necesidades. Una vez le preguntamos a Nuestra Señora por qué nos había elegido a nosotros y ella respondió que había seguido la voluntad de Dios, Dios lo decidió y ella es la Sierra del Señor que hace lo que Dios quiere. En otras ocasiones, cuando recomendábamos a alguien a la Virgen, ella nos respondía que ella nos puede dar las gracias que Dios le concede, por lo que la Virgen es un nexo entre nosotros y Dios, como un hombre que nos une a él.

La alegría de servir a Nuestra Señora

Padre Livio: Una de las cosas que más me edifica de ustedes, videntes, es que desde hace más de diez años le dan su día a la Virgen. Además de acoger a los peregrinos y estar disponible para las personas con las que os encontráis, tenéis una cita con la Virgen todas las tardes, precedida y seguida de oración. Hoy, sin embargo, los jóvenes quieren ser libres y no tienen que esperar años. Muchos dicen abiertamente: “La vida es mía y hago con ella lo que quiero”. A cambio, vive en esta disponibilidad continua, ofreciendo el tiempo de su vida a Nuestra Señora. Bueno, ¿este sacrificio te costó mucho o hay algo que da buena suerte?

Vicka: Prefiero ver que muchas veces no tengo suficiente tiempo. Viene mucha gente y hay tantas cosas que hacen. Me llaman aquí y allá y cuando llega la noche le digo a Dios: «Hoy pude haber hecho un poco y podría haber hecho más». Pero trato de comprometerme durante todo el día y, a veces, incluso durante parte de la noche. Sin embargo, cuando me acuesto hago un examen de conciencia y digo: “Hoy he recibido a mucha gente, he ido de many logares, pero quizás podría haber hecho más y mejor”. Siempre te hace pensar que si hubiera podido hacer otra cosa.

La alegría de ayudar a los demás.

Sin embargo, debo decidir que no hay mayor alegría que transmitir mensajes y decir que Dios me tiene lástima. Hay otros para mí que no puedo expresar con palabras o imágenes. No hay nada más maravilloso que ayudarlos, darle una mano a Carlos y asegurarte de que Nuestra Señora quiere y Dios mismo quiere de mí. Esto para mí es lo más importante. Fue y es en primer lugar en mi vida. Pero más allá de cualquier consideración, es una gran alegría para mí poder ayudar a las personas, extender una pequeña mano y hacerlo con el corazón. No hay cosa más maravillosa que ayudará a tu herman o herman a todos los peregrinos que se acerquen. Todos habláis una palabra y debéis estar en la lista para dar esta pequeña alegría a los demás.Siempre digo que Nuestra Señora me ha dado tanto…

“Estoy muy feliz con mi vida”

Padre Livio: ¿Estás contento con tu vida?

Vicka: ¡Pero muy feliz, davvero muy feliz! No hay alegría que puedas colocarla en el último lugar de esto. Simplemente no existe.

Padre Livio: Si notas que eres feliz. Mantén impresa en tu rostro ya la Virgen la sonrisa de María como premio a todo el trabajo que ella ha hecho también para prestarte sus ojos. Pero los otros jóvenes, que a cambio están angustiados o experimentando el vacío de la vida, pueden pensar que se mantienen a salvo porque han tenido una gran misión que cumplirán, mientras no hayan recibido ningún área importante.

Vicka: Pero no, cada uno de nosotros tiene una misión que cumplir, estoy segura. Yo tengo esto, tutenes otro. Los hay que estudian, los que trabajan, los que son médicos, etc.: cada uno tiene su vocación particular, que debe tomar en serio. Si uno se compromete y trata de ayudar a los demás, esto ya es una misión.

(Entrevista con Vicka realizada por el Padre Livio en Medjugorje el 8.3.1998 en vivo con Radio María)